Esto es lo que le pasa a tu piel cuando duermes maquillada

Esto es lo que le pasa a tu piel cuando duermes maquillada

Has tenido un día (o una noche) muy largo y sabemos que lo último que quieres hacer es quitarte el maquillaje... ¡pero escúchanos!

 

Imagínatelo: por fin has llegado a casa después de una noche de fiesta con tus amigos y, como un canto de sirena, la cama te llama. Sería tan fácil quitarse los zapatos, meterse bajo las sábanas y pasar la noche con los ojos pintados y tu makeup.

Por supuesto, ya lo has oído antes: dormir maquillada es una mala idea. Pero, ¿te haría daño una noche?

En una palabra, no.

Pero, ¿merece realmente la pena despertarse con los ojos secos, escocidos y la piel apelmazada? Éste es sólo uno de los problemas a los que tendrás que enfrentarte cuando decidas dormir maquillada. Y cuando adquieres el hábito de dormir con el maquillaje puesto, te enfrentas a una plétora de problemas a largo plazo.

Hoy hablaremos de lo que le ocurre a tu piel cuando duermes maquillada y de cómo puedes desarrollar una rutina de cuidado de la piel.


Brotes de acné

Es posible que alguna vez te hayas despertado después de dormir maquillada y te hayas encontrado con algún que otro brote de acné. Esto se debe a que dormir con maquillaje puede depositarse en los poros, lo que provoca obstrucciones y acné.

Ojeras

Si te despiertas con ojeras y los ojos hinchados, el maquillaje puede ser la causa subyacente. La máscara de pestañas, el delineador y la sombra de ojos pueden irritar la delicada zona ocular, lo que naturalmente provoca inflamación e hinchazón.

Piel seca

Dormir con maquillaje durante largos periodos de tiempo puede afectar negativamente al proceso natural de desprendimiento de la piel. Y cuando las células muertas de la piel no se desprenden correctamente, el cutis se vuelve opaco y seco.

Envejecimiento prematuro

Cuando no nos lavamos la cara, corremos el riesgo no sólo de tener los poros obstruidos, sino también de envejecer prematuramente. Esto se debe a que el maquillaje tiende a retener los radicales libres a los que se expone a lo largo del día. Y cuando ese maquillaje no se retira correctamente, la piel queda abandonada a su suerte, ya que esos radicales libres empiezan a descomponer el colágeno, lo que provoca líneas finas y arrugas con el tiempo.

Picor e irritación de la piel

Si hubiera una razón por la que deberías lavarte la cara todas las noches, sería para reducir la propagación de microbios dañinos en la piel que se produce al dormir maquillada, lo que puede causar inflamación.

Cuando la piel se inflama, suele picar, enrojecerse e irritarse, lo que puede resultar muy molesto para la persona. Además, una rutina de limpieza adecuada incluirá una crema hidratante, que ayuda a nutrir la piel y a reponer la hidratación.

Comprometerse con una rutina de cuidado de la piel

Como vemos, hay muchas razones para desmaquillarse por la noche. Sin embargo, no nos referimos a pasarse una toallita desmaquillante por la cara y desmayarse. Nos referimos a adoptar una rutina de cuidado de la piel que consista, como mínimo, en un limpiador y una crema hidratante.

Una rutina nocturna de cuidado de la piel es importante porque tiene lugar durante nuestro periodo de descanso, que es un momento crítico para nuestra piel. Cuando dormimos, las hormonas curativas del cuerpo se disparan, lo que aumenta el ritmo de reparación de los tejidos. Pero cuando dormimos maquillados, este proceso regenerativo puede verse obstaculizado, lo que puede tener graves consecuencias para el envejecimiento de la piel.

Limpiando suavemente el rostro y aplicando los tratamientos adecuados, se pueden maximizar los beneficios del proceso de reparación nocturno de la piel, lo que ayuda a garantizar una piel bella y radiante para toda la vida.

Limpiador


No es de extrañar que la cara sea una de las partes más sucias del cuerpo, con toda la contaminación a la que está expuesta y el número de veces que la tocamos a lo largo del día. Tampoco es de extrañar que cuando no nos lavamos la cara, los poros tengan más probabilidades de obstruirse y provocar brotes.

Sin embargo, cuando decimos "lavarse la cara", no queremos decir "enjuagarse la cara con un chorrito de agua". Cuando te limpias, es importante hacerlo de forma que elimines eficazmente (y con suavidad) toda la suciedad, el maquillaje, el protector solar y el exceso de sebo.

Aquí es donde recomendamos una doble limpieza. Una doble limpieza es una rutina de limpieza en dos pasos que consiste en un limpiador a base de aceite, seguido de un limpiador a base de agua. La idea de este método es que el limpiador oleoso extrae las impurezas oleosas, como el maquillaje y el sebo, mientras que el limpiador acuoso elimina los restos.

Para un limpiador en aceite, recomendamos algo extra nutritivo que derrita el maquillaje, como nuestro Bálsamo Limpiador de Naranja Sanguina. A continuación, utiliza un limpiador con agua hidratante que no deje marcas, como nuestro Gel Limpiador de Agua de Rosas.

Tónico


No hay duda de que lo has visto en el pasillo de productos de belleza de tu farmacia, normalmente un líquido transparente y ligero que suele estar formulado con hamamelis, corteza de sauce o agua de rosas.

Pero, ¿qué es exactamente un tónico y por qué debe formar parte de tu rutina de cuidado de la piel?

Básicamente, un tónico es un líquido a base de agua que ayuda a restaurar gradualmente los niveles de hidratación de la piel y a mantener el pH equilibrado. Y lo que es mejor: como los tónicos son a base de agua, son fáciles de infusionar con distintos ingredientes botánicos. Por ejemplo, nuestro tónico hidratante Restorative Sea Culture utiliza algas marinas para hidratar, rellenar y suavizar la piel.


Sérum


Aunque los sérums no son la máxima prioridad en una rutina de cuidado de la piel, pueden marcar una gran diferencia en tu piel.

Los sérums son un tipo de fórmula muy concentrada que penetra en profundidad en la piel a gran velocidad. Son especialmente útiles para tratar problemas específicos de la piel, como el acné y los signos del envejecimiento. Gracias a su textura ligera y viscosa, los sueros faciales se absorben rápidamente en la piel y aportan beneficios a nivel celular.

Algunos sérums están pensados para aportar luminosidad, como nuestro Brightening Serum, mientras que fórmulas como nuestro Water Locking Serum de sandía y pepino ayudan a retener la humedad y nutrir la piel.

Crema hidratante


Sea cual sea tu tipo de piel, la crema hidratante es uno de los productos más útiles en cualquier rutina de cuidado nocturno.

A medida que envejecemos, los factores hidratantes naturales de nuestra piel empiezan a disminuir con el tiempo, lo que puede provocar sequedad, grietas y descamación.

Las cremas hidratantes ayudan a mantener la piel hidratada, lo que hace maravillas a largo plazo. La crema hidratante adecuada para ti dependerá de tu tipo de piel; si tienes la piel seca, te recomendamos una crema hidratante profundamente nutritiva como nuestra Hydra Drench Cream. En cambio, las pieles más grasas se beneficiarán más de una fórmula ligera, como nuestra Crema Hidratante Equilibrante Árbol del Té.


¿El maquillaje es malo para la piel?


Aunque el maquillaje en sí no daña directamente la piel, el exceso de acumulación en los poros puede provocar no sólo obstrucciones, sino también la acumulación de polvo, contaminación y sudor.

En resumidas cuentas: cuando nos tomamos el tiempo de cuidar nuestra piel por la noche -aunque sólo sea para limpiarla e hidratarla- nos estamos ahorrando una gran cantidad de problemas.